sábado, 22 de agosto de 2009

Jano

A mis hijos y mis nietos


Jano


Si de fingir se trata,
diría que no ha pasado nada.
Pero la vida es mágica,
siempre hay un antes y un después.
Y en éste ámbito me muevo, bifronte,
en sentidos opuestos,
entre cambios y transiciones.
Ayer fue el pasado y la nada.
Hoy, es el mismo pasado, y al menos
la diminuta extensión de estos versos.

La protección de Dios,
alcanza hasta este umbral.
Pretende solamente variar el orden de las cosas.
Me protege y me honra,
ante un nuevo proyecto.

A lo lejos un hombre y una mujer se aman;
y ha nacido un niño un poco más allá.
A todo final se antepone un comienzo.
Las puertas ostentan su danza mas sublime,
la de dar espacio a la muerte,
la de abrirse a la vida.




© 2009 by Eduardo Dante Dall´Ara





http://es.wikipedia.org/wiki/Jano

1 comentario:

  1. Esta muy bueno el poema, solo agregaría que, aunque parezca una verdad de perogrullo, hace poco descubrí que hay un ahora. Y la vida se fue transformando en un eterno ahora, sin antes ni despues.

    un abrazo

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